LA CRISIS DE 1898 Y LA LIQUIDACIÓN DEL IMPERIO COLONIAL

guerra-de-cuba-tropas-del-ejercito-español

Durante el reinado de Fernando VII la práctica totalidad del imperio español alcanzó la independencia. Solo Cuba y Puerto Rico, en América, y las islas Filipinas, en el Pacífico, se mantuvieron bajo soberanía española.

PROBLEMAS COLONIALES

Arrancaban ya en el Sexenio, cuando se inició una primera guerra cubana, pero fue en la década final del siglo XIX cuando estos problemas se agudizaron por el contexto internacional: los movimientos emancipadores coincidieron con el auge del imperialismo europeo y con el creciente expansionismo de Estados Unidos.

Puerto Rico no planteaba serios problemas, pues en 1872 había conseguido su autonomía, la esclavitud había sido abolida y tenía una economía saneada. El autonomismo se dividió en dos corrientes, una más españolista y otra más radical, ambos sectores se unieron en 1887 en el Partido Autonomista.

En Cuba, sin embargo, las reformas adquirieron un especial carácter por el significado de la isla para España. En 1886 se había abolido de forma total la esclavitud. El autonomismo en Cuba fue una fórmula intermedia que defendía la españolidad de la isla, pero con una identidad propia dentro de unos vínculos con España de carácter solidario, pero no colonial. El Partido Liberal Autonomista representó en Cuba estas ideas; una Cuba española, pero libre, con derecho de autodeterminación y regulada por leyes propias. La postura más radical e independentista fue la aglutinada por el Partido Revolucionario Cubano, creado por José Martí en 1892. La base social estaba formada por el campesinado, la burguesía criolla, que comercia mayoritariamente con Estados Unidos, y las clases populares. El Partido fundado por Martí en 1892 impulsa el movimiento independentista que estalla con el “Grito de Baire”.

La gran preocupación de los gobiernos de la Restauración fue mantener a toda costa la posesión sobre Cuba y Filipinas, no se ofrecieron alternativas políticas autonomistas que colmaran las demandas de la burguesía criolla. La paz de Zanjón de 1878 solo aplazó el problema cubano, las esperanzas criollas se vieron frustradas porque la esclavitud no fue abolida hasta 1886. El proyecto de autonomía que en 1893 presentó Antonio Maura llegó demasiado tarde y además fue rechazado por el Parlamento español.

GUERRA DE CUBA

Para la mayoría de los políticos españoles autonomía equivalía a independencia. La guerra de Cuba estalló de nuevo en 1895 con el llamado Grito de Baire, los líderes independentistas fueron José Martí líder del Partido Revolucionario Cubano; los generales Máximo Gómez y Antonio Maceo. Entre 1895 y1898 el gobierno español envió a Cuba 220.000 soldados, aun así los rebeldes contaban con gran apoyo popular y estaban mejor adaptados al terreno. La opinión pública española fue inicialmente partidaria de la guerra, exceptuando federalistas, socialistas, anarquistas y algunos intelectuales como Unamuno y políticos como Sabino Arana. El apoyo popular disminuyó a medida que se hacían visibles los costes de la guerra, los jóvenes adinerados llamados a filas compraban la redención del servicio de armas, solo los pertenecientes a las clases populares embarcaban hacia Cuba.

La guerra atravesó varias fases. Inicialmente el gobierno liberal de Sagasta intento una política de negociación y envió a la isla al general Martínez Campos que fracasó y se negó a aplicar medidas represoras sobre la población civil. El nuevo gobierno de Cánovas envió al general Weyler, representante de la línea dura, cuyo objetivo era la victoria militar sin negociaciones. Después del asesinato de Cánovas en 1897, Sagasta accedió al gobierno, sustituyó a Weyler y retomó, demasiado tarde, la política de negociación. Fue en este momento cuando EEUU decide intervenir, tenían intereses económicos de primer orden en la isla, en especial los de la Amerrican Sugar Refining Company.

Guerra de cuba 1895

GUERRA DE LOS CIEN DÍAS HISPANO-ESTADOUNIDENSE

El 15 de febrero de 1898 la voladura del acorazado Maine fue el pretexto para una declaración de guerra que se desarrolló en el Caribe y Filipinas. Este acorazado había sido enviado a Cuba para proteger los intereses norteamericanos, el gobierno de los Estados Unidos lanzó una oferta de compra de la isla por 300 millones de dólares, y ante la previsible negativa española, lanzó un ultimátum al gobierno español. La guerra fue rápida y comenzó en Filipinas, los americanos tomaron Cavite el uno de mayo y Manila; en Cuba la flota fue derrotada el tres de julio en Santiago. La guerra, también conocida como de los Cien Días, finalizó el 12 de agosto y el diez de diciembre de 1898 se firmó el Tratado de París por el que España perdía Cuba, ocupada de manera provisional por EEUU, y cedía a los norteamericanos Puerto Rico, Guam y Filipinas, estas últimas a cambio de 20 millones de dólares. Tres archipiélagos del océano Pacífico: Marianas, Carolinas y Palaos fueron vendidas en 1898 a Alemania a cambio de 15 millones de dólares.

Entre las consecuencias de la derrota destacaron:

MILITARES. Evidencia de que las Fuerzas armadas no estaban preparadas para afrontar con garantías el conflicto.

ECONÓMICAS. Resultó negativo la perdida del mercado colonial aunque la industria nacional se recuperó pronto. Los capitales situados en América fueron repatriados, como consecuencia positiva.

HUMANAS. La perdida de 50.000 combatientes produjo una conmoción intensa en la sociedad española

POLÍTICAS. Se criticó con severidad la torpeza de la política oficial pero el sistema político sobrevivió. Se produjo una auténtica crisis de la conciencia nacional que se manifestó de forma especial en la actitud pesimista de los intelectuales y escritores de la generación del 98 y en el regeneracionismo. En el terreno de la reflexión política surgió el regeneracionismo, a algunos políticos e intelectuales les sorprendió como la opinión pública aceptó la derrota con resignación. Los regeneracionistas con Joaquín Costa a la cabeza situaban el origen del problema en el sistema político de la Restauración, viciado y enfermo. Su lema era “escuela, despensa y doble llave al sepulcro del Cid”. Para Costa la voluntad popular había sido anulada por la oligarquía económica y política mediante el caciquismo. Propuso acabar con el caciquismo para recuperar la verdadera democracia y poner en práctica una reforma educativa. Propuso para solucionarlo un “cirujano de hierro”, es decir, una especie de gobernante autoritario temporal destinado a salvar España de sus males. Los regeneracionistas no quisieron formar partidos ni participaren la vida política.

Preguntas frecuentes para practicar

¿Qué decía la Paz de Zanjón?

La Paz de Zanjón de 1878 solo aplazó el problema cubano y no cumplió las expectativas de los criollos, ya que la esclavitud no fue abolida hasta 1886.

¿Qué pasó en 1895 en Cuba?

En 1895 estalló la guerra de independencia cubana con el «Grito de Baire». Los líderes independentistas fueron José Martí, Máximo Gómez y Antonio Maceo.

¿Qué provocó la guerra de Cuba?

La falta de alternativas políticas autonomistas por parte de España y la frustración de la burguesía criolla impulsaron el movimiento independentista. El Partido Revolucionario Cubano, fundado por José Martí en 1892, promovió la lucha por la independencia.

¿Qué perdió España en la guerra de Cuba?

España perdió Cuba, que quedó ocupada provisionalmente por EE.UU., y además cedió Puerto Rico, Guam y Filipinas a los norteamericanos. También vendió las Marianas, Carolinas y Palaos a Alemania.

¿Qué pasó en Cuba en 1898?

En 1898 EE.UU. intervino en la guerra cubana y derrotó a España. Cuba quedó ocupada temporalmente por los estadounidenses tras la firma del Tratado de París.

¿Qué ocurrió entre España y EE.UU. en 1898?

La guerra hispano-estadounidense, también llamada «Guerra de los Cien Días». EE.UU. derrotó a España en Filipinas y en Cuba, lo que llevó a la firma del Tratado de París el 10 de diciembre de 1898.

¿Por qué los Estados Unidos le declararon la guerra a España?

EE.UU. utilizó la voladura del acorazado Maine como pretexto para la declaración de guerra. También tenía importantes intereses económicos en la isla, especialmente relacionados con la American Sugar Refining Company.

¿Quién ganó la guerra entre Estados Unidos y España?

Estados Unidos ganó la guerra y España perdió sus últimas colonias en América y el Pacífico.

¿Qué fue la guerra hispano-americana?

Fue el conflicto entre España y EE.UU. en 1898, que se desarrolló en el Caribe y en Filipinas. Se conoce también como la «Guerra de los Cien Días». Terminó con la derrota de España y la firma del Tratado de París.

¿Qué perdió España en 1898?

España perdió Cuba (ocupada provisionalmente por EE.UU.), Puerto Rico, Guam y Filipinas (cedidas a EE.UU.). También vendió las Marianas, Carolinas y Palaos a Alemania.

¿Cuáles fueron las consecuencias de la guerra hispano-estadounidense?

-Militares: Se evidenció que las Fuerzas Armadas españolas no estaban preparadas para el conflicto.
-Económicas: España perdió su mercado colonial, aunque la industria nacional se recuperó pronto.
-Humanas: Murieron 50.000 combatientes, lo que causó una fuerte conmoción en la sociedad española.
-Políticas: Se generó una crisis de conciencia nacional reflejada en la Generación del 98 y el regeneracionismo.

¿Qué significó para España perder la guerra hispanoamericana?

Significó la pérdida de sus últimas colonias en América y el Pacífico. Además, hubo una crisis de identidad nacional, con un fuerte impacto en la política y la cultura española.

¿Qué consecuencias trajo la guerra de Cuba en el año 1895?

La guerra llevó a la intervención de EE.UU. en 1898, la derrota de España y la pérdida de sus colonias. También generó descontento en la sociedad española y debilitó al sistema político de la Restauración.